El Getafe volvía a jugar en el Coliseum por primera vez tras la eliminación en Mestalla y, ante esto, la afición azulona tenía preparado un recibimiento a la altura del papel que habían hecho los suyos en la Copa del Rey. Sin embargo, el partido no comenzó de la forma esperada para los de Bordalás, ya que, no se había cumplido el segundo minuto de juego cuando los gallegos se adelantaron en el marcador con un cabezazo de Araujo a la salida de una falta. Sin embargo, inmediatamente después de recibir el gol, el feudo azulón continuó con la sonora ovación que estaban dedicando a su equipo.

En el minuto 13 de partido, el Getafe hizo una combinación que terminó con un disparo de Jorge Molina desde la frontal del área que se marchó fuera. Poco después, Boufal puso en apuros a la zaga azulona con una buena jugada individual, pero finalmente el balón salió a saque de esquina.

En el ecuador de la primera parte, Jaime Mata remataba desviado un centro de Damián Suárez desde la banda derecha. En la jugada siguiente, Jorge Molina forzaba un córner que atrapó sin problemas Rubén Blanco. El Getafe siguió buscando el gol y, a diez minutos del descanso, a la salida de una falta lateral, González Fuertes señalaba penalti de Hugo Mallo.

Antes de que se lanzara el penalti, el Celta se quedaba con uno menos por la expulsión de Maxi Gómez, que vio la segunda amarilla por protestar. Finalmente, Mata convirtió el penalti por la derecha de Rubén Blanco, poniendo así las tablas en el marcador. Justo antes de que se cumplieran los primeros 45 minutos reglamentarios, Maksimovic remató al palo un centro raso desde la derecha, pero, finalmente, la jugada quedó invalidada por fuera de juego.

Ya en el tiempo añadido, Hugo Mallo convertía el segundo gol para los suyos con un disparo potente ante el que nada pudo hacer David Soria. Sin embargo, el asistente levantó el banderín y, tras unos minutos de espera, el VAR ratificó su decisión, por lo que el gol no subió al marcador.

Así se llegó al descanso en el Coliseum, en un primer tiempo donde el Celta se adelantó muy pronto, pero el Getafe supo reponerse, creó más ocasiones y consiguió igualar la contienda. Además, los visitantes se quedaron con un jugador menos por la expulsión de Maxi Gómez, que deja a su equipo en inferioridad numérica durante prácticamente una hora de juego.

En el primer minuto del segundo tiempo, Jaime Mata se quedó solo frente a Rubén Blanco, pero este hizo una parada salvadora y evitó el segundo tanto de los locales. Diez minutos después, Mata volvía a ver portería, pero el gol fue anulado por fuera de juego. En la siguiente jugada, el Celta dispuso de una ocasión de gol que fue desbaratada por David Soria.

Cumplida la hora de juego, Bordalás movió el banquillo y Arambarri fue sustituido por Flamini. Justo después, un centro al segundo palo desde la banda derecha encontró a Mata, que se la dio de cabeza a Jorge Molina para que este empujara el balón al fondo de la red y adelantara al Getafe en el marcador, culminando así la remontada azulona.

En el minuto 70, Bordalás hacía su segundo cambio al retirar del terreno de juego a Samu Saiz para que Portillo ocupara su lugar. Cinco minutos después, Brais Méndez se internó en el área azulona, pero Cabrera fue al corte e interceptó su disparo.

A falta de diez minutos para el final, Mata aprovechó un error de Rubén Blanco para convertir el tercer gol azulón, segundo en su cuenta particular, que ponía las cosas muy difíciles al Celta de Vigo. Después del gol, Bordalás agotó sus cambios retirando a Mata, que recibió una gran ovación de la afición azulona al abandonar el terreno de juego.

Con el partido ya decidido, ambos equipos bajaron el ritmo y no hubo más ocasiones, por lo que el Getafe se llevó los tres puntos en un partido que tuvo de todo. Los de Bordalás supieron reponerse al tempranero gol del Celta, y remontaron el partido gracias, en gran medida, a un estelar Jaime Mata, que empató el partido de penalti, sirvió a Jorge Molina el segundo y cerró el partido aprovechando un error de Rubén Blanco para poner el 3-1.